Como hacer pan en panificadora. Receta del pan de molde de miel

 

Cada vez que en el Lidl ponen a la venta su panificadora me pedís recetas para hacer pan de molde fácil y muy esponjoso. Yo creo que más que una receta lo que necesitamos es saber como hacer pan, conocer como funciona nuestra panificadora y en que podemos ayudarla para conseguir unos panes caseros deliciosos. Si dedicamos unos minutos a observar la masa va cambiando durante el proceso y comprendemos el porqué sabremos la relación que esto tiene con los ingredientes que estamos usando y como debemos utilizarlos.

A mi me gusta el pan como el de la foto, esponjoso pero con una miga compacta y algo de corteza y por eso generalmente lo hago en el programa 1 de pan normal, si te gusta con la miga más abierta y blandito solo tienes que escoger el programa 2 de pan esponjoso, el pan queda más alto y las rebanadas son más grandes. Incluso puedes meterlo en una bolsa de plástico cuando está caliente para que la corteza quede bien blanda.

Esta es una visita guiada al interior de vuestra panificadora mientras hacemos un sencillo pan de molde de miel que es uno de los mejores panes para todos los días. Y recuerda que las panificadoras más caras no son las que hacen los mejores panes al igual que los juguetes fabulosos no hacen que te diviertas más... el conocimiento y la práctica son lo único que los hará mejorar.

Si queremos que un pan hecho en la panificadora quede bien horneado y con la parte superior tostada no debemos poner demasiada cantidad de masa, cuanto más alto sea el pan menos espacio quedará entre él y la tapa lo que impedirá que aire caliente circule y la superficie quedará paliducha.

Para hacer un pan sencillo con una panificadora de doble paleta como la Biffinet del Lidl, necesitaremos los siguientes ingredientes:

• medio kilo de harina (blanca, integral o mezcla de ambas), según las harinas empleadas podemos llegar a usar 550 gr., hay que empezar poniendo la cantidad más pequeña y añadir si es necesario.
• 300 gr. de liquido (agua, leche, suero de leche, yogur, huevos...)
• 2 cucharadas de grasa (mantequilla, aceite, manteca...)
• 1 de azúcar (miel, sirope de Ágave, mermelada...)
• 1 1/2 cucharadita de sal fina, si te gusta más salado puedes poner 2 cucharaditas
• 1 sobre de 5,5 gr. o 2 cucharaditas de levadura seca de panadería

* Utilizaremos la cuchara que viene con la panificadora para medir la sal y la levadura porque es más sencillo y más preciso al tratarse de cantidades muy pequeñas. La parte grande es una 'cucharada' y la pequeña una 'cucharadita'. Debemos medir siempre la levadura porque si ponemos demasiada el pan subirá muchísimo durante el levado y colapsará mientras se hornea, también es importante usar la cantidad correcta de sal ya que demasiada impedirá el levado de la masa y el pan resultará muy denso.

A estos ingredientes básicos podremos añadirles frutos secos, semillas, queso... en este caso el ingrediente extra es la miel ya que se trata de un pan de miel.

Para empezar con el pan necesitaremos preparar todos los ingredientes, un papel y un boli. Es bueno apuntar exactamente lo que echamos en la cubeta y las cantidades, si el pan que resulta nos gusta mucho podremos repetirlo sin problemas. Debemos anotar también la marca de las harinas que utilizamos ya que no todas se comportan igual, así también sabremos las que mejores resultados nos dan.

Ingredientes para un pan de molde de miel

150 gr. de agua
150 gr. de leche semidesnatada
2 cucharadas de aceite de girasol
3 cucharadas de miel
500 gr. de harina de trigo de fuerza o harina de espelta blanca**
1 1/2 cucharaditas de sal fina
2 cucharaditas de levadura seca de panadería

** Podemos usar harina de trigo de fuerza pero también poner la mitad de harina de fuerza y el resto de harina normal, es cuestión de probar la combinación que más nos agrade. Como ahora no puedo comer trigo últimamente hago el pan con harina de espelta y para este pan de hoy he usado espelta blanca (sin nada de salvado) + 1 cucharada de gluten de trigo.

Preparación

Enchufa la panificadora, saca la cubeta y coloca las paletas amasadoras, pon dentro todos los ingredientes en el orden en que están escritos. No os preocupeis si la sal y la levadura se tocan, no pasa nada, para que la sal estropee la levadura deberían estar juntas mucho tiempo, si las ponemos en el agua y programamos la panificadora para hacer pan dentro de unas horas entonces es posible que el resultado no sea muy bueno, en este caso van sobre la harina.

Deja la tapa levantada para poder observar el amasado y

• Selecciona el programa 1 si te gusta el pan con corteza y con la miga más compacta como el de la foto, el programa 2 si lo prefieres con una corteza más blanda y con la miga más abierta
• Cancela el calentamiento salvo en invierno o si tus harinas están frías y húmedas, de esta manera acortaremos casi en una hora el tiempo total, este programa rápido es ideal para panes como éste con bastante azúcar y que levan rápidamente, no es adecuado para otro tipo de panes que necesitan más tiempo de levado final.
• Arranca el programa

(El tiempo que se ve en la foto no es el total del programa sino el del inicio del segundo levado)

Ahora comienza el primer amasado, observa como se va formando la masa del pan poco a poco, al final de este amasado es cuando hice la foto siguiente, la masa debe ser suave y algo pegajosa pero las paredes y el fondo de la cubeta han de estar limpias.

• Si vemos que quedan restos de harina seca tendremos que añadir algo más de agua, sólo una cucharada cada vez.
• Si la masa está muy liquida y cubre todo el fondo de la cubeta tendremos que añadir algo de harina, una cucharada cada vez.

Esto lo haremos cuando empiece el segundo amasado.

Al terminar el tiempo de reposo empieza el segundo amasado durante el cual oiremos un pitido que nos avisa porque es el momento de añadir las semillas, los frutos secos o cualquier ingrediente que le vayamos a poner al pan, de esta manera no se molerá durante los amasados ni interferirá en la formación de la masa.

Después del amasado viene un tiempo corto de levado, una vez terminado la maquina mueve las paletas y recoge la masa, la deja como veis en la siguiente foto, preparada para el levado largo y final. La masa está blanda y muy esponjosa pero al tocarla con el dedo este no se hunde y vemos que opone cierta resistencia.

Este es el momento para quitar las paletas con el gancho metálico que viene con la panificadora, enganchamos la punta de la paleta con el aro y la sacamos, podemos aplastar un poco la masa con la mano mojada para distribuirla uniformemente. Si no queremos o se nos olvida quitarlas el pan levara y se horneará con ellas.

Si quieres quitarlas y a la vez darle un poco de forma a la masa este es el momento, debes actuar deprisa para no acortar el tiempo de levado, sólo hay que sacar la cubeta, volcar la masa en la mesa enharinada y retirar las paletas.

Le daremos forma más o menos cuadrada metiendo las yemas de los dedos por debajo de la masa y estirando, como esta enharinada no se nos pegará a los dedos.

Ahora doblamos la parte derecha de la masa sobre el centro y después la parte izquierda sobre ella. Siempre cogeremos la masa por la parte de abajo que tiene harina y sólo con las yemas de los dedos.

Enrollamos empezando por arriba, justo antes de terminar estiramos un poco el pedazo de masa que queda al final y terminamos de enrollar.

Ya tenemos el pan formado, lo dejamos con la parte lisa hacia arriba y el cierre debajo.

Ahora echamos unas gotas de aceite en la cubeta y la frotamos con ayuda de un papel de cocina, no es porque haga falta engrasarla sino por retirar todos los restos de harina que hayan quedado. Limpiamos bien con el papel las dos bases metálicas donde se colocan las paletas.

Colocamos el pan el pan dentro y lo aplastamos suavemente.

Dejamos que continúe el programa hasta que termine el horneado, la máquina pitará para avisarnos.

Con unos guantes de horno puestos sacaremos la cubeta y la colocaremos tumbada sobre una superficie resistente al calor. Giraremos las dos rueditas que hay en la base, esto mueve las bases metálicas donde se colocan las paletas y dejarán libre el pan.

Agarrando la cubetas por los dos lados hacemos un movimiento de vaivén y el pan saldrá solo. ahora sólo queda colocarlo sobre una rejilla para que enfríe completamente antes de cortarlo, piensa que el pan sigue haciéndose mientras está caliente.

Hacer pan en casa es un experiencia muy gratificante, compartirlo aún más... no importa que el resultado sea excelente o solamente aceptable... siempre será mejor y más saludable que el que puedes comprar en el supermercado.