Boston Cream Pie Cupcakes

El Boston Cream Pie o Pastel de crema de Boston es un bizcocho -preferiblemente un sponge cake- relleno de crema pastelera y cubierto con un ganache de chocolate, en realidad un "Cake" y no un "Pie". El Parker House Hotel de Boston lo sirve desde 1856 y se hizo tan popular en todo el estado que en 1996 se convirtió en el Postre Oficial del Estado de Massachusetts.

Estos Boston Cream Pie Cupcakes son del libro Martha Stewart's CUPCAKES, una gran idea hacer varios pequeños en lugar de uno grande. Con las cantidades propuestas en la receta salen 20 cupcakes y para nosotros son demasiados así que congelé la mitad y preparé también la mitad de pudding para el relleno y de cobertura de chocolate.

Tanto la receta del bizcocho como la manera de mezclarlo me ha encantado, son los más esponjosos que he preparado pero al mismo tiempo conservan la forma y no se desmigan, un hallazgo!. He simplificado la preparación usando pudding de vainilla para el relleno por lo que nos aseguramos que la crema quedará con una consistencia perfecta y podemos conservarlos a temperatura ambiente al no llevar huevo. En lugar de hacer un ganache utilicé chocolate negro para cobertura aligerado con un poco de leche. Lo de las bolitas de azúcar de colores un churro, si me pillan los de Massachusetts...

. 

Ingredientes

3 huevos
1 taza (200 gr.) de azúcar
6 cucharadas (60 gr.) de mantequilla
1/2 taza (100 gr.) de leche entera
1 1/2 taza (190 gr.) de harina de trigo o de espelta blanca
1 1/2 cucharaditas de levadura de repostería
1/2 cucharadita de sal fina
1 cucharadita de extracto de vainilla

para el relleno de crema
1 sobre de preparado para pudding de vainilla
2 cucharadas de azúcar
500 gr. de leche entera

para la cobertura de chocolate
100 gr. de chocolate negro para cobertura
4-6 cucharadas de leche entera

Preparación

Encender el horno a 180ºC. Preparar las bandejas para muffins untando cada cavidad con mantequilla y espolvoreándolas de harina con ayuda de un colador, retiramos el exceso de harina poniéndolas boca a bajo. Tamizar en un bol la harina, la levadura de repostería  y la sal. Poner en un cazo o en una jarrita para microondas la leche y la mantequilla que calentaremos hasta que esté a punto de hervir.

Batir los huevos con el azúcar hasta conseguir una crema pálida y semimontada, unos cinco minutos, bajar un poco la velocidad y añadir la mezcla de la harina a cucharadas, batir solo hasta que este incorporada. Echar la mezcla de la leche y la mantequilla mientras batimos a velocidad baja para que se incorpore poco a poco y por último, añadir la vainilla.

Repartir la crema en las cavidades llenándolas solo hasta la mitad, si tienes moldes de 12 huecos habrá que hornear dos veces, colocamos la bandeja de los muffins sobre la rejilla en el centro del horno y lo dejamos durante unos 15 minutos o hasta que al pincharlos con un palillo éste salga sin restos de masa, hay que tener cuidado de no hornear demasiado para que no se sequen.

Sacar la bandeja del horno y colocarla sobre una rejilla para que enfríe durante 10 minutos y meter la otra en el horno. Pasado ese tiempo desmoldarán sin problemas pero quizá alguno necesitará algo de ayuda así que pasaremos la punta de un cuchillo por el borde para despegarlo. Dejamos enfriar los bizcochitos sobre una rejilla. Se pueden preparar el día antes y conservarlos a temperatura ambiente o congelarlos hasta cuando los necesitemos.

Preparamos el pudding siguiendo las instrucciones del paquete, yo he usado el de Lidl. Hay que poner en un vaso el azúcar y los polvos del pudding, medir la leche fría en una jarrita y echar un poco en el vaso, remover con una cucharilla hasta conseguir una crema. Calentar el resto en el microondas hasta que rompa a hervir, incorporar el contenido del vaso y volver a hervir para que cuaje, remover bien hasta que quede una crema lisa y dejarla enfriar un poco para que empiece a cuajar.

Trocear el chocolate negro para cobertura en una jarrita y añadir cuatro cucharadas de leche entera, calentar en el microondas durante 30 segundos y remover bien, necesitaremos calentarlo unos segundos mas y remover de nuevo para comprobar la consistencia, si está demasiado espeso añadir una cucharada de leche y remover hasta que esté a nuestro gusto.

Para rellenarlos los partiremos por la mitad con un cuchillo de sierra y los rellenaremos con una cucharada del pudding, es importante ponerlo cuando esté empezando a cuajarse, algo caliente pero no recién hecho. Colocamos encima la tapa presionando ligeramente para que se adhiera. Cuando la cobertura de chocolate tenga la consistencia adecuada echaremos una buena cucharada por encima de cada uno, justo en el centro para que lo cubra. Se conservan bien hasta el día siguiente dentro de una caja plástica.