Helado de turrón de Jijona

Este helado es de los que más me gustan, lo hago con turrón de Jijona porque es la manera más fácil, en Navidad suelo comprar varias tabletas para hacer helados durante el resto del año. El bizcocho es un Genovés, por lo tanto muy esponjoso, lo tenía congelado y no es necesario dejarlo descongelar del todo, lo justo para cortarlo a la mitad. Es buena idea hacer dos cuando necesitamos uno porque se tarda lo mismo y siempre tenemos uno en el congelador para ese día que no hay tiempo y en nada preparas una tarta.

Se puede utilizar sólo como cualquier otro helado pero de esta manera se puede incluso comer con los dedos, sin plato ni cubiertos y es ideal para una comida veraniega al aire libre porque facilita la tarea de servir el postre. Si lo queremos convertir en una tarta helada más vistosa sólo hay que cubrirlo con chocolate caliente y almendras fileteadas tostadas o con nata montada y almendras tostadas enteras.

Esta tarta cunde mucho, calculo que salen una 18-20 raciones como la de la foto, si en casa sois pocos y no lo podéis terminar en un día no hay problema, se conserva perfectamente en el congelador sin cristalizar, en parte por el azúcar invertido y el licor y también porque esta cubierto por el bizcocho que hemos emborrachado.

Ingredientes

Un bizcocho Genovés o un bizcochuelo

Para el helado

500 gr. de turrón de Jijona

500 gr. de leche evaporada

4 yemas de huevo

200 gr. de nata para montar

2 cucharadas de licor de almendra

2 cucharadas de sacarina líquida

2 cucharadas de azúcar invertido

Para el almíbar

100 gr. de azúcar

50 gr. de agua

2 cucharadas de licor de almendra

Preparación

El tetrabick de leche evaporada debe estar en el congelador desde el día anterior. Hay que sacarlo a temperatura ambiente una hora antes, que no se descongele, sólo lo justo para poder sacar la leche de la caja y la montamos como si fuese nata. Va a quedar muy esponjosa pero no totalmente montada, en ese momento añadimos la nata y seguimos montando. Añadimos las yemas, el turrón picado a cuchillo, el azúcar invertido, el licor de almendra y la sacarina líquida, lo removemos y lo mantecamos en la heladera durante media hora. Si quieres saber como hacer azúcar invertido pulsa aquí. 

Mientras hacemos un almíbar ligero con el agua y el azúcar, cuando esté listo añadimos el licor de almendra y lo echamos en una jarrita para que enfríe un poco. Cortamos el bizcocho por la mitad y emborrachamos las dos mitades sólo por la parte interior, se puede hacer con un pincel de silicona para que quede uniforme.

Preparamos un molde del tamaño del bizcocho que tenga aro desmontable y forramos el fondo del molde con papel de hornear. Preparamos dos tiras de papel para colocar alrededor del aro. Ponemos la mitad del bizcocho en el fondo del molde procurando que las tiras de papel del aro queden fijadas con el propio bizcocho. Sacamos el helado de la máquina directamente sobre el bizcocho, colocamos la tapa presionando muy ligeramente para que no quede aire dentro. Cubrimos el molde con papel de aluminio y lo metemos en el congelador al menos 6 horas pero mejor hacerlo el día antes.

A la hora de servirlo sólo hay que retirar el aro y el papel y cortar, si no se va a utilizar todo no le quitaremos el papel del todo sino que lo despegaremos lo justo que nos permita cortar un trozo y volveremos a colocar el papel y el aro cubriéndolo todo con el papel de aluminio, de esta forma lo podemos conservar varios días.