Pan de centeno y pipas de girasol

Un pan muy secillo ya que se amasa en la panificadora, el ideal para empezar a hacer pan. He utilizado la premezcla de pan centeno con pipas de girasol del Lidl así que todavía más fácil. Una buena manera de probar harinas diferentes con el resultado asegurado.

Lo hago a menudo porque me gusta el sabor del centeno y con las pipas más rico. Es ideal para desayunar, tostado y con mantequilla pero también para hacer bocadillos y sanwiches porque su miga densa permite cortarlo muy fino.

Ingredientes

3 tazas de premezcla de harina de centeno con pipas

1 taza de agua tibia

2 cucharaditas de levadura seca

1 cucharada de aceite de girasol

Preparación

Introducir todos los ingredientes en la cubeta de la panificadora, elegir un programa de amasado y levado, sin horneado. Observar la masa durante los primeros minutos del amasado por si necesita una cucharada más de harina para formar la bola de masa, si la mezcla está muy seca añadir una cucharada de agua.

Cuando termine, sacar la masa a una superficie ligeramente enharinada y darle forma de bola, cubrirlo con un paño y dejarlo descansar 20 minutos.

Encender el horno al máximo colocando la piedra o una bandeja de horno de las negras en una posición media-baja del horno.

Estirar con un rodillo de amasar hasta conseguir un rectángulo y lo enrollar como si fuese un brazo de gitano, procurar que la barra quede bien gruesa,  hacerlo rodar con las dos manos y colocarlo sobre un papel para horno con la unión hacia abajo.

Cubrirlo con un paño y dejarlo levar hasta que doble su volumen, entre 30 y 60 minutos dependiendo de la temperatura ambiental.

Hacer cortes paralelos de un lado a otro de la barra, bajar la temperatura a 200º y hornear unos 30 minutos.

Dejar enfriar completamente sobre una rejilla antes de cortarlo.