Helado de café al chocolate

Me encantan los helados pero últimamente tengo predilección por el de café, éste además lleva un poco de chocolate con leche que no influye mucho en el sabor pero se nota la diferencia. También me gustan los sandwiches helados, he publicado uno hecho con bizcocho, el helado de almendra pero a diferencia del bizcocho que no presenta ninguna dificultad, hacer galletas que aguanten bien el helado sin romperse ni reblandecerse es más complicado, al menos para mí, así que después de probar varias creo que como mejor queda es con las Digestive de Avena de Hacendado. 

El emparedado de la foto estuvo una semana en el congelador, casi tengo que ponerle protección personal pero lo conseguí, hoy estaba perfecto, las galletas aguantaron muy bien y se puede comer recién sacado del congelador porque no se cristalizó en absoluto.

Es un helado increíblemente cremoso, yo creo que tiene que ver con hacer una crema base para helado, la leche y las yemas ayudan mucho. Tiene un sabor intenso que predomina aún tomándolo con las galletas, por supuesto también se puede tomar sólo, yo suelo hacer una buena cantidad y antes de mantecarlo en la máquina lleno una docena de moldes para polos, si son de silicona mantienen el helado cremoso durante días.... 

Ingredientes

500 gr. de leche entera

4 huevos

una pizca de sal

130 gr. de azúcar Amarelo o normal

30 gr. de azúcar invertido

50 gr. de chocolate con leche

1 cucharadita de Maicena desleida en un poco de leche

4 cucharadas de café soluble

4 cucharadas de crema de café

400 gr. de nata para montar

• Si no utilizas azúcar invertido se sustituye por miel, puedes ver como se hace aquí.
• La crema de café le da un sabor muy bueno, si no tienes le puedes poner la misma cantidad de crema de whisky o la mitad de licor café. 
• Últimamente utilizo azúcar Amarelo para los postres, tiene un sabor que me recuerda la vainilla y la miel, es azúcar integral de caña de color crema y con aspecto arenoso, no tan granulado como el azúcar normal, se sustituye por éste en la misma cantidad.
• La nata para los helados debe tener un 35%  de materia grasa, eso hace que monte rápido y bien y que el helado quede muy cremoso y no cristalice, pero no todas las de 35% m.g. funcionan igual, las que más me gustan son la de Eroski y la de Central Lechera Asturiana.

Preparación

En My Cook: Pesar la leche y añadir los huevos, el café soluble, el azúcar Amarelo, el azúcar invertido y la sal, batir unos segundos para mezclar bien. Programar 3 minutos a 100º, añadir el chocolate troceado y programar 5 minutos a 90º, en el último minuto echar la Maicena disuelta en un poco de leche. Añadir la crema de café y batir uno o dos minutos en velocidad 3 sin calor para enfriar un poco y homogeneizar. Sacar la crema inmediatamente a un taper y cerrarlo para que no forme costra, cuando enfríe lo refrigeramos hasta el día siguiente o hasta que esté muy frío.

Sin máquina se hace igual pero en un cazo a fuego muy bajo o al baño maría, como si hiciésemos natillas, batiendo con una varilla y con un poco de paciencia... 

Cuando la crema esté bien fría la aligeramos con una varilla, montamos la nata y la mezclamos con la crema con cuidado de que no pierda volumen. Yo lleno 12 moldes de polos con la crema resultante, el resto lo manteco en la máquina de hacer helado hasta que tenga consistencia y lo  guardamos en el congelador en un taper cuadrado y grande, que quede del espesor que nos guste para rellenar las galletas, cuando el helado esté bien duro podemos montar los emparedados, la versión rápida es hacer una bola de helado y colocarla entre dos galletas, aplastar y comer... la bonita es un pelín más laboriosa...

Preparamos las galletas y un cortapastas redondo de 7 cm. de diámetro, cortamos una porción de helado y luego metemos una galleta dentro del cortapastas, colocamos la parte del helado sobre la otra galleta y presionamos ligeramente hasta que podamos retirar el cortapastas, si es de acero es mejor hacerlo rápido porque al enfriarse se pegará al helado y cuesta más. Metemos los emparedados en el congelador sobre una bandeja, al cabo de un rato podemos decorarlos con unas chocolatinas. Cuando estén bien firmes ya los podemos guardar en un taper cerrado para que no cojan sabores ni olores. No hace falta descongelarlos antes de comerlos.