Gofres de espelta o de trigo con masa madre

Desde que me compré la gofrera eléctrica estoy experimentando recetas, las hago con harina de espelta blanca usando la misma cantidad que se pondría de harina de trigo para todo uso. Algo que no sabía es que hay muchos tipos de masa para gofres, desde ésta que es la más liquida y sirve para hacer Pancakes o Tortitas, hasta una que parece masa de pan y se usa una bolita para cada gofre.

Ahora cada domingo desayunamos gofres recién hechos ya que la masa se prepara con antelación y se mantiene refrigerada, casi se tarda menos en hacerlos que en hacer el zumo y café... aún no he publicado ninguna porque a esas horas no me animo a hacer fotos pero hoy si que las hice, son bastante cutres pero se ve perfectamente el proceso. Quedan muy ligeros y crujientes, por dentro esponjosos... a mí son los que más me han gustado por ahora.

Esta receta es de de King Arthur Flour, se llama Classic Sourdough Waffles or Pancakes, es una masa muy líquida que resulta perfecta también para hacer Tortitas o Pancakes. Me gusta porque se puede hacer con la masa madre que guardamos en la nevera y a la hora de refrescarla no se tira sino que se usa para hacer la esponja. Yo suelo guardar unos 50 gr. de masa madre así que no me llega, he utilizado masa madre refrescada y burbujeante que tenía para hacer pan, en ese caso el tiempo de reposo de la esponja es mucho menor pero queda igual de bien.

Ingredientes para 12 gofres

para la esponja

2 tazas (241 gr.) de harina de espelta blanca o de trigo para todo uso

2 cucharadas (28 gr.) de azúcar

2 tazas (454 gr.) de buttermilk ó 440 gr. de leche y 14 gr. de zumo de limón

1 taza (241 gr.) de masa madre

para la mezcla final

toda la esponja

2 huevos

1/4 de taza (50 gr.) de aceite de oliva suave o mantequilla fundida

3/4 cucharadita de sal fina

1 cucharadita de levadura de repostería

Preparación de la masa

Mezclar todos los ingredientes de la esponja y dejarla reposar. Si se usa la masa madre directamente de la nevera dejaremos reposar la esponja toda la noche, si se usa la masa madre cuando rya se había refrescadao y esá bien activa bastará con 4-6 horas, siempre a temperatura ambiente.

Cuando esté lista la esponja hay que batir los huevos con el aceite o la mantequilla y mezclarlos con ella. añadir la sal y la levadura y batir, la mezcla empezará a burbujear.

Ya se pueden preparar los gofres con la mezcla o guardarla en la nevera, yo la preparo el día antes y los hago para desayunar, están buenos de las dos maneras, como salen muchos se pueden preparar unos cuantos y guardar el resto.

Preparación de los gofres

Es muy sencillo hacer gofres en una gofrera eléctrica, sólo hay que pincelar ligeramente las placas con un poco de aceite y encenderla al máximo, no es necesario volver a aceitarla aunque preparemos muchos gofres, sólo la primera vez.

Lo más importante es echar la cantidad de masa adecuada, esta es muy líquida y hay que echar hasta que se vean algunos cuadraditos de la plancha, los de la siguiente foto están bien, se veían más cuando la eché, los 15 segundos que tardé en hacer la foto ya había crecido y los había cubierto casi del todo, no debemos poner más. Ya sólo queda bajar la tapa y esperar entre cinco y seis minutos.

En este caso puse masa hasta que no se veía la plancha, sólo un poquito más que en la foto anterior, en cuanto entra en contacto con el calor empieza a burbujear y a crecer...

Y se sale por los bordes, al bajar la tapa empezará a gotear hasta que se elimine lo que pusimos de más... los gofres quedarán bien de todas maneras pero es un incordio.

Después de dos minutos de cocción están así de esponjosos, estos son los de la primera foto, si ponemos la cantidad justa de masa quedan perfectos.

Aquí a los cuatro minutos de cocción, aún no están listos porque sólo están empezando a tostarse, tardan entre cinco y seis minutos, sabremos que están listos porque deja de salir humo por los bordes de las parrillas, eso es que ya ha evaporado todo el líquido y están cocinados y crujientes.

Cuando estén listos se retiran fácilmente con ayuda de unas pinzas, se sirven dados la vuelta porque la cara de abajo está más en contacto con las placas y resulta más bonita.

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