Llevo unas semanas a dieta y he cambiado bastante mi manera de comer pero sigo haciendo cada semana un caldo a fuego lento, ahora en lugar de añadirle fideos o arroz lo tomo tal cual. Iniciar una comida o cena con un tazón de caldo calentito resulta muy saciante y saludable. Este caldo de jamón con verduras en Slow Cooker o Crock Pot cocinado a fuego lento durante 12 horas se convierte en un manjar de sabor rico y profundo pero no tiene ese regusto a rancio de los caldos de hueso de jamón hechos en olla a presión.
Seguramente os estáis preguntado ¿Merece la pena cocerlo durante 12 horas? ¡Puedes hacerlo en una olla a presión en media hora! Es cierto pero el sabor que se consigue con una cocción lenta durante muchas horas es incomparable, además es muy cómodo porque sólo tienes que ponerlo en la cazuela y olvidarte.
Otra pregunta lógica ya que estamos acostumbrados a que los buenos caldos hay que desespumarlos: ¿Porqué no se pone a hervir y se retiran las impurezas y toda esa espuma que sube a la superficie antes de cocinarlo? Con estas cazuelas de cocción lenta no se hace así pero no tenemos que preocuparnos por las impurezas, cuando sacamos el caldo además de notar que tiene un color muy intenso, transparente y limpio observaremos que en las paredes se ha adherido los restos y no se han mezclado con él.
Otra pregunta lógica ya que estamos acostumbrados a que los buenos caldos hay que desespumarlos: ¿Porqué no se pone a hervir y se retiran las impurezas y toda esa espuma que sube a la superficie antes de cocinarlo? Con estas cazuelas de cocción lenta no se hace así pero no tenemos que preocuparnos por las impurezas, cuando sacamos el caldo además de notar que tiene un color muy intenso, transparente y limpio observaremos que en las paredes se ha adherido los restos y no se han mezclado con él.
Ingredientes
- 1 hueso de jamón
- 1 cebolla
- 2 zanahorias
- 1 calabacín
- 1 puerro
- 1 rama de apio
- 1 repollo pequeño
- 1 cucharadita de sal
- 3 granos de pimienta negra
- 1 hoja de laurel
Preparación
- Lavamos y pelamos las verduras, partimos la cebolla y el repollo a la mitad y ponemos todos los ingredientes en la cazuela, los cubrimos con agua y cocemos durante 12 horas a temperatura Baja (Low).
- Preparamos un recipiente grande y ponemos encima un colador fino, vamos sacando el caldo con un cucharón, procurando no remover para que quede limpio y transparente, hasta que sólo queden los restos del hueso y las verduras en la cazuela. Observaremos que en las paredes se ha adherido los restos (ya que no lo hemos espumado) y por eso el caldo sale tan limpio.
- Cuando el caldo esté tibio podemos refrigerarlo para poder retirar el exceso de grasa y al día siguiente veremos que nuestro caldo es pura gelatina. Lo conservaremos en la nevera o lo congelaremos, hay que tener en cuenta que estará algo soso porque es mejor sazonarlo cuando vayamos a utilizarlo.
Mi querida Salomé: ¡Yo vivo a dieta! jajaja, es que tengo unos "detallitos" de salud, que me impiden comer muchas cosas y no queda otra. Esto para que no te sientas sola :) Tienes toda la razón, se podrá hacer más rápido en la olla a presión, pero el resultado es otro, estos cocidos o sopas a fuego lento lentísimo, son lo mejor. No tengo la olla crock, pero sí otra que da la talla y la puedo dejar toda la noche al fuego. Así que ya me voy a preparar una gran sopa como la tuya. Besitos y mucho éxito con tu dieta
ResponderEliminarAquí sigo a dieta y me va genial! Este caldo no tiene nada que ver con uno hecho en la olla a presión, lleva su tiempo pero la diferencia merece mucho la pena.
EliminarEs una maravilla de cazuela.....tengo que probar una que me ha ofrecido un amigo hace mil años....
ResponderEliminarBesos guapa
Marialuisa
Prueba y verás que maravilla, no es la mejor para cocinar todo pero para los caldos no hay otra!
EliminarNo pensaba que las impurezas se podrían retirar con tanta facilidad en este tipo de olla! Gracias por compartir la receta y el consejo :o)
ResponderEliminarBesos y feliz semana,
Palmira
Se quedan en las paredes y el fondo así que no hay problemas para sacar el caldo limpito.
EliminarUna auténtica pasada de caldo, y te doy toda la razón, las ollas de cocción lenta potencian el sabor de la tradición, a mi personalmente me compensa :)
ResponderEliminarCompensa mucho cada vez que tomas una taza de caldo ¿verdad? Es una delicia!
EliminarQue maravilla Salomé, yo no tengo la olla crook, pero no dudo que el caldo estará de rechupete , no hay más que ver los ingredientes que lleva, desde luego que pienso probar este caldo aunque lo haga en la olla normal.
ResponderEliminarUn besito y feliz semana.
El caldo este es perfecto tambien para cocinar estofados, les da mucho sabor y gelatina.
EliminarHola acabo de conocerte gracias a un blog amigo y me encanta tu blog, Qué maravilla de caldo!! y el arroz con pulpo tiene una pinta exquisita y las lentejas al curry te han quedado espectaculares!!! así que por aquí me quedo como seguidora para no perderme nada. Un saludo
ResponderEliminarElena del blog: Unas Gotas de Imaginación
¡Muchas gracias!
EliminarYo me acabo de hacer con una olla lenta de las de MGI, con capacidad de 1,5 l, no sé si me compensa hacer caldo en ella, pero estoy deseando probar hacer un caldo como éste, qué pinta y qué rico debe estar. Gracias por tus recetas.
ResponderEliminarLa de MGI de 1,5 litros es muy útil para cocinar para dos, yo la uso mucho pero se queda pequeña para un caldo, con el tamaño de 3,5 litros ya sale una cantidad aceptable para consumir y congelar.
EliminarYa puedo hacer tu caldo, ya di es salto a la de 3,5 l y estoy encantada. Gracias por tus recetas.
EliminarMe alegro, yo ahora lo hago en la de 3,5 litros, lo pongo 12 horas y retiro el caldo, añado algo de apio, zanahoria y puerro y lo lleno otra vez de agua, después de otras 12 horas tienen otro caldo riquísimo!
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