Pan de espelta y patata

Otra prueba con la espelta.... ya que no puedo añadir harina de trigo le puse un poco de fécula de patata para 'suavizarlo' y no quedó mal, la fécula es a la patata como el almidón al maíz pero al ser la patata un tubérculo se le llama fécula en lugar de almidón, se puede sustituir por copos para hacer puré de patata. Lo amasé en panificadora sólo cinco minutos porque me temo que un amasado excesivo sólo rompe el poco gluten que tiene la espelta pero es sólo una suposición, me quedan unos mil panes para dar con lo que le conviene a esta harina... espero mejorar los resultados con la masa madre que acabo de preparar.

La espelta es una variedad de trigo ideal para el cultivo ecológico ya que la cáscara que protege al grano es más dura que la de otros cereales y esto evita que sufra el ataque de los insectos haciendo innecesario el uso de pesticidas, además no requiere un gran aporte de fertilizantes. Gracias a este cultivo natural se obtiene un cereal que apenas produce intolerancias y su empleo en la dieta en lugar de trigo puede hacer desaparecer algunos problemas de salud no achacables a una enfermedad conocida como son los respiratorios, digestivos y de piel, el malestar general con dolores musculares y de cabeza, la incapacidad para adelgazar aunque se respete la dieta... pero contiene gluten por lo que está contraindicada en la dieta de los celiacos al ser intolerantes al gluten.

Ingredientes

1 taza de agua

12 gr. de levadura fresca de panadería

2 1/2 tazas de harina de espelta blanca

1/2 taza de fécula de patata

1 cucharadita de sal fina

1 cucharada de miel

1 taza = 240 ml.

Preparación

Poner todos los ingredientes en la cubeta de la panificadora y amasar durante 6 minutos, sacar la masa a un bol y cubrirlo con un paño para que repose durante una hora.

Sacar la masa a una superficie enharinada y estirarla con las manos para formar un rectángulo, enrollar y colocar en un molde bien engrasado. He usado un molde muy ancho para que el pan quedase tipo barra y conseguir unas rebanadas sin demasiada miga.

Encender el horno a 220ºC mientras la masa leva, el pan había doblado su tamaño en sólo media hora por lo que hay que tener el horno bien caliente para poder hornearlo sin perder tiempo y evitar un levado excesivo. Meter el molde en el horno y bajar la temperatura a 190ºC, hornear durante 45 minutos. Enfriar completamente sobre una rejilla.