Ya no tengo niños pequeños, el mío es tan mayor que pronto me hará abuela.... y aún recuerdo cuando hacíamos magdalenas juntos, lo mucho que se divertía ayudando y lo orgulloso que se las comía. Creo que es bueno iniciar a los niños en la cocina desde muy pequeños, seguramente les ayudará a aceptar todos los alimentos y a valorar el esfuerzo y la satisfacción que conlleva hacer la comida cada día. No está de más que aprendan que lo que comemos no sale de las estanterías del super, que allí se compran los ingredientes y luego se prepara en casa. Ojalá que la próxima generación que ahora empieza a caminar no sea tan aficionada a los precocinados ni a la comida basura pero eso lo conseguiremos los mayores, con nuestro ejemplo.
Una de las cosas que más les gusta a los peques son los dulces y estos muffins serán unos de sus favoritos. Llevan mucho plátano y yogur, sólo 10 gr. de azúcar y una cucharadita de grasa saludable por pieza y los chips de chocolate que les encantan, desde luego son bastante más recomendables que cualquier dulce industrial. Su ayuda puede ser real ya que tienen que engrasar los moldes, cortar el plátano, incorporar y batir los ingredientes y mezclar todo al final. Dejaremos para las mamás el rellenar los moldes con la pasta salvo que hay niños grandes y, desde luego, meter y sacar la bandeja del horno.
He preparado los muffins con harina para repostería sin gluten ya que cada día hay más personas que descubren que son celiacas o simplemente que no pueden tomar trigo, en el primer caso hay que asegurarse que los demás ingredientes también están libres de gluten. Esta receta es del libro Super Muffins y funciona perfectamente si utilizamos harina de trigo para todo uso o harina de espelta blanca.